miércoles, 26 de noviembre de 2014

Zapatos: Lo que muestras cuando andas.

Hay mucho de nuestra forma de ser en la manera de vestirnos de cada uno. De hecho, la Universidad de Kansas llevó a cabo un estudio en el que se determinó que la gente es capaz de deducir incluso hasta el 90% de la personalidad de otra persona con tan sólo mirar el tipo de calzado que calza. Si deseas conocer que estás enseñando de tu personalidad por medio de tus zapatos, continúa leyendo.
Factor 1: La clase social
Como es de imaginar, cuando alguien ve unos zapatos caros en los pies de otro individuo, tiende a decidir que esa persona tiene un strato social elevado y una capacidad adquisitiva alta. Por el contrario, cuando la otra persona calza unos zapatos económicos, se suele deducir que no tenga unos ingresos elevados.
Factor 2: La libertad de pensamiento
Esta pista ya no es tan evidente. El estudio reveló que aquellas personas que utlizaban calzado cómodo y ligeramente más económico, tenían una forma de pensar más liberal que quienes calzaban zapatos incómodos y algo más caros. Lo sorprendente del estudio no es sólo la confirmación de este detalle, ¡sino que las demás personas pudieron adivinarlo con tan sólo observar los zapatos!
Factor 3: La personalidad
La investigacion también reveló que quienes hacían uso de zapatos funcionales, tales como deportivas, tenían una personalidad amable y amistosa. Por otro lado, los caracteres más agresivos se inclinan por utilizar botas y botines. Y aun va más allá, las personas tranquilas se deciden por el uso de zapatos con acabados menos atractivos, más comunes.

Otros Factores

Al margen de lo recientemente expuesto, también se constató que las personas observadas relacionaban las botas altas con la antipatía, los taconazos con la inestabilidad emocional, los zapatos de marca con los varones, el zapato incómodo con la dama, el zapato colorido con la tranquilidad, y los zapatos de moda con el dinero.
¿Desconcertante?
En realidad, que los zapatos digan la personalidad de aquél que los calza no es algo extraño ni sorprendente. Cualquier cosa que compramos, está directamente relacionado con nuestra personalidad y de comportarnos.
Es lógico que si adquieres unos zapatos cómodos en vez de unos incómodos, primas el confort.Poca gente optaría por los zapatos incómodos. Ahora bien, ¿y si los zapatos cómodos fuesen horripilantes, y los incómodos bonitos? Aquí, el equipo que analizásemos, se dividiría. Ello nos indicaría quién prefiere la comodidad al estilo, y al contrario.

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